Aquí os dejo unas imágenes del último trabajo del Taller de Serranos, como siempre todas nuestras obras siguen un proceso manual, que requiere tiempo y delicadeza, para conseguir acabados diferentes, para diferenciar cualquier pieza de mobiliario y personalizarla para cada espacio y cada cliente. En éste caso hemos combinado el laminado de cobre con el craquelado de la tapa en ésta consola de dos patas especial para recibidores estrechos.
Todo ello pulverizado a pistola para conseguir luces y sombras.
Un acabado diferente y que combina a la perfección con cualquier tono, pero sobre todo y en especial con beiges, grises, tostados y nacarados.
Así ha sido el proceso en manos de nuestro artista artesano Perea.
Estos son los pasos básicos de su trabajo:
Primeramente hay que empezar por lijar bien toda la pieza para alisar las imperfecciones de la madera.
Seguidamente se aplica una imprimación a toda la pieza.
Se cubre toda la superficie con láminas de pan de cobre, montando una sobre otra de forma irregular.
Una vez bien adherida ésta capa se retira el sobrante con brocha suave, se pule y se pulveriza el barniz negro con pistola, inssitiendo en las juntas para conseguir mayor relieve.
Importantísimo el barniz de acabado de alta dureza para garantizar la resistencia al roce y al tiempo del mueble. El trabajo de veteado se dibuja a mano con pincel, a gusto del cliente, para conseguir el acabado artesanal y personal que buscamos en todas nuestras piezas.
Sólo queda elegir un tono que contraste para la tapa, en éste caso elegimos un beige, y craquelarla para conseguir el efecto roto. Un contraste que da mayor sensación metálica a la estructura de las patas.
Los accesorios decorativos se buscan en tonos coordinados para armonizar todo el conjunto.
Añadimos un espejo de forma original hecho a medida también en el taller siguendo éstas mismas pautas, y ya tenemos un rincón diferente, exclusivo y muy personal.
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| Consola y espejo originales |
